La semana que hoy comienza será decisiva para comprobar qué tanta capacidad de gestión y protagonismo puede y está dispuesto a asumir la administración Fox en América Latina. Después de la crisis en las relaciones con Cuba, de las acusaciones cruzadas, de las advertencias sobre la existencia de una relación enfocada exclusivamente en los intereses bilaterales con Estados Unidos, esta semana el presidente Fox y el canciller Jorge Castañeda tienen la oportunidad (que no se presenta todos los días) de demostrar que este gobierno tiene una verdadera vocación latinoamericanista.