El presidente Vicente Fox inició desde el jueves pasado y hasta el próximo martes, un corto periodo de descanso. Quienes están cerca del primer mandatario en los últimos días dicen que se le ha visto molesto, insatisfecho e impaciente por los resultados que no se perciben en la gestión de su gobierno y hechos como los de Atento terminan dañando la imagen internacional y las propias expectativas de la población y de los inversionistas.