En la política y en las labores de gobierno, el conocer los tiempos, no sólo es una virtud: es un elemento clave que decide un proyecto. Nuestros políticos no están sabiendo utilizar y evaluar, el factor tiempo. El tiempo se esta convirtiendo en un enemigo de la administración Fox y aparece asechando a Andrés Manuel López Obrador con la ambición abierta de muchos de sus colaboradores de colocarlo ya, hoy, en la carrera para el 2006.