El viernes publicamos las listas de las fórmulas para el senado que ya estaban definidas en el equipo de campaña de Labastida en una veintena de estados. Entre el jueves en la noche y la tarde del sábado, hubo pocos movimientos pero lo suficientes para ver en dónde funcionó la presión de ciertos gobernadores y algunos vetos que, muy probablemente, provinieron de Los Pinos. Lo cierto es que la negociación final se dio el viernes en la noche y allí se hicieron los ajustes sobre la lista que se había definido 24 horas antes.
El viernes publicamos las listas de las fórmulas para el senado que ya estaban definidas en el equipo de campaña de Labastida en una veintena de estados. Entre el jueves en la noche y la tarde del sábado, hubo pocos movimientos pero lo suficientes para ver en dónde funcionó la presión de ciertos gobernadores y algunos vetos que, muy probablemente, provinieron de Los Pinos. Lo cierto es que la negociación final se dio el viernes en la noche y allí se hicieron los ajustes sobre la lista que se había definido 24 horas antes.
No hubo demasiadas novedades. Sin duda la más importante es la decisión de lanzar a Genaro Borrego Estrada, actual director del IMSS, ex presidente nacional del PRI y ex gobernador de Zacatecas, como cabeza de fórmula para intentar recuperar esa entidad, luego de la debacle que implicó para el priísmo el triunfo electoral de Ricardo Monreal, un cuadro político que creció, precisamente, durante la gestión de Genaro en Zacatecas. La salida de Borrego Estrada del IMSS, después de ocho años al frente del mismo y luego de haber realizado una notable reforma de sus estructuras y principios operativos (en términos reales es la única gran reforma estructural realizada durante este sexenio que la gente ha podido apreciar en forma directa, personal), deja un espacio que dará lugar en las próximas horas a muchas especulaciones.
Por ejemplo, ahí está el caso Tabasco. Roberto Madrazo logró algunos objetivos importantes en las listas: por lo pronto, colocó a los dos aspirantes a senadores en su estado, Georgina Trujillo, la alcaldesa de Villahermosa, y Oscar Cantón Zetina. En Oaxaca, logró colocar a Ulises Ruiz, su principal operador electoral. Recordemos que, por encima de Manuel Andrade, el actual líder del Congreso local, Gina Trujillo parecía ser la verdadera carta de Madrazo para la gubernatura. Colocada ya en el senado y con Arturo Nuñez habiendo renunciado al liderazgo priísta en la cámara de diputados para buscar la candidatura (¿alguien podría creer que Arturo se hubiera lanzado a la aventura tabasqueña sin red de protección?) no descarte usted que Madrazo deje Villahermosa para comenzar a despachar desde las remozadas oficinas del Seguro Social en Paseo de la Reforma. Era, hasta la tarde de ayer domingo, una especulación, pero, insistimos, no la descarte.
A quien ya no pudo colocar Madrazo fue a Fernando Baeza Meléndez en Chihuahua, pero si la presunción anterior se cumple, lo necesitará como buen administrador en sus nuevas responsabilidades. Otro ex gobernador que se cayó de la lista a última hora fue Eliseo Mendoza Berrueto, en Coahuila, reemplazado por una figura local, Alejandro Gutiérrez Gutiérrez, mucho más cercano a los intereses del gobernador Enrique Martínez. Un tercer gobernador no estuvo finalmente en la lista pero en este caso por decisión personal: Enrique Burgos García en Querétaro, fue reemplazado por Silvia Hernández, aunque Andrés Garrido del Toral, una pieza local importante de Mariano Palacios Alcocer, sí quedó en la fórmula. La pregunta es si Burgos se quedará en el DIF o tendrá abierta alguna otra puerta.
En el Distrito Federal, estaba más que decidida de lanzar al subsecretario de Eduación Pública, Benjamín González Ruaro, fue desconcertante. Entró en su lugar Kena Moreno, que durante varios años había estado fuera de labores políticas (aunque muy activa con los centros de integración juvenil). La idea, evidentemente, es ampliar los espacios para mujeres, pero González Ruaro tenía apoyo de los más altos niveles del equipo de campaña, en sectores estratégicos del gobierno y, sobre todo, en el sector magisterial. Pero no le alcanzó para estar en la lista definitiva.
El subsecretario que sí está en ella, como habíamos adelantado, es César Camacho Quiroz, que en los pocos meses desde que dejó al gubernatura del estado de México, estuvo primero en el consejo político nacional del PRI y hasta ahora en Desarrollo Político de la SG, donde había trabajado con mucho acierto. Acompaña a César Camacho un hombre que fue de sus principales colaboradores en el estado, Heberto Barrera, lo que implica que la responsabilidad del priísmo en el Edomex, no estará en manos ni de Emilio Chuayffet ni de Carlos Rojas, sino de Camacho Quiroz. Habrá que estar muy atentos para ver con quién reemplaza Diódoro Carrasco a una pieza muy importante para esa institución, un puesto que, de por sí y tomando en cuenta el equipo que se ha formado en Gobernación puede servir para muchos reacomodos políticos.
En la tierra del secretario de Gobernación, en Oaxaca, el gobernador José Murat hizo hasta lo imposible por quitar de la lista de senadores a quien fue su principal adversario en la lucha por la candidatura (que fue, por cierto, la última decidida, por dedazo desde el centro), el diputado José Antonio Estefan Garfias y lo logró. Tuvo que aceptar que encabezara la lista Miguel Sadot Sánchez, pero en segundo lugar quedó su amigo Ulises Ruiz (el también operador electoral de Roberto Madrazo).
Finalmente, en Jalisco, es donde hubo otro cambio: salió el empresario, incluido en las listas del Fobaproa, Salvador Martínez Garza, y fue reemplazado por el también empresario y ex banquero, Raymundo Gómez Flores, famoso, sobre todo, por su cercanía con José Córdoba Montoya. Con todo, hay quienes aseguran que el PRI sí quiere recuperar Jalisco.
En Sonora, por el contrario, como era previsible, llegó Eduardo Bours, sin duda uno de los hombres más cercano a Labastida, acompañado por Miguel Ángel Murillo, lo que implica que Luis Colosio Fernández, muy probablemente estará en la lista de plurinominales al senado. En Sinaloa, como era previsible, las dos posiciones son claramente labastidistas: Lauro Díaz Castro (que fue derrotado por Juan S. Millán en la interna por la candidatura) y Marta Tamayo Morales. Y en Veracruz, estarán, como se había anunciado, Fernando Gutiérrez Barrios y Fidel Herrera. Finalmente en el único estado donde las divergencias afloraron y no hubo una fórmula única, fue en Baja California. Allí estará como habíamos dicho Jaime Martínez Veloz, acompañado por Roberto Pérez de Alva, pero deberán enfrentarse a la fórmula de Carlos Bustamante Anchondo y Antonio Meza Estrada, ex secretario particular de Ernesto Zedillo en la SEP, y que dejó hace algunas semanas, la dirección de la Comisión del Libro de Texto Gratuito, para comenzar su lucha por la candidatura a gobernador. De más está decir que en esta elección interna a candidato a senador él, más que ninguno de los otros, se juega su futuro.
Podrá o no gustar la lista para el senado del PRI, pero lo cierto es que aquello del nuevo PRI, por lo menos en esta lista no se ve.
Archivos recuperados
No tengo porqué poner en duda la autenticidad de los papeles que publicó la página de internet To2 sobre las investigaciones realizadas por la Sedena respecto a varios periodistas y analistas, entre los que este autor está incluido, con relación a la información que manejábamos respecto al conflicto chiapaneco, durante 1995 y 1996. No sé en qué nivel de la Sedena se realizaron esos análisis que me imagino hacen todas las dependencias de inteligencia. Pero el general Enrique Cervantes debe sancionar a quién las realizó, quizás no por hacer esas fichas, sino por lo mal hechas, inexactas, plagadas de chismes de café y deducciones absurdas en casi todos los casos. Si alguien se quiere basar en esa información para saber quiénes somos los periodistas y analistas de este país llegará, una y otra vez y en prácticamente todos los casos a conclusiones equivocadas. Quizás por eso.