04-05-2017 Muchas preguntas, muchos reacomodos y muchas casualidades en torno a la importante captura de Dámaso López. Comencemos por una de las más trascendentes.
¿La captura de Dámaso López impedirá, como dijeron las autoridades, una alianza de su grupo dentro del cártel de Sinaloa con el Cártel Jalisco Nueva Generación?Probablemente la retrasará, pero el efecto será el contrario: sin su jefe, sin un esquema de protección luego de la caída de Dámaso y acosado por enemigos internos, lo más probable es que los sucesores de Dámaso, sobre todo su hijo apodado El Mini Lic, terminen de forjar esa alianza en contra de los hijos del Chapo Guzmán y también de Ismael El Mayo Zambada, quien terminará, como decíamos ayer, hegemonizando la organización criminal.
La alianza de El Mini Lic con el Chapito Isidro, el principal operador en Sinaloa de los remanentes de los Beltrán Leyva, enemigos ambos de los hijos del Chapo, parece inevitable. Y los grupos del Chapito Isidro ya están trabajando con el CJNG.
Por eso, El Mayo Zambada está llamado a recuperar la hegemonía del cártel de Sinaloa si esa organización quiere sobrevivir. Los hijos del Chapo han demostrado que no tienen el peso ni la capacidad que tenía su padre. Pero las casualidades, esas en las que no hay que creer cuando se analizan estos temas, los han ayudado. El mismo día que cayó Dámaso López quedó en libertad Miguel Ángel Guzmán Loera, el Mudo, hermano de El Chapo Guzmán, después de once años de prisión.
El Mudo siempre fue un operador muy importante del Chapo y uno de sus hombres de confianza. Otro de sus hermanos, Arturo, apodado El Pollo, fue asesinado en el penal del Altiplano, por otro interno, José Ramírez Villanueva, el 31 de diciembre de 2004. Unas semanas después, El Mudo fue detenido en Culiacán, y ahora con su condena cumplida quedó en libertad el mismo día que caía Dámaso. Se estima que tras su liberación se puede convertir en una pieza clave del cártel de Sinaloa, apoyando a sus sobrinos, los hijos del Chapo.
Hablando de casualidades. El mismo día que se detuvo a Dámaso López murió de un sorpresivo infarto, su jefe de seguridad en Sinaloa. Se llamaba David López y supuestamente murió en medio de un enfrentamiento con fuerzas de seguridad. No es un golpe menor: simultáneamente murió “infartado” el jefe de seguridad de Dámaso mientras que su operador financiero y de logística, Víctor Geovanny González Sepúlveda, era detenido en Azcapotzalco. El grupo de Dámaso se quedó, en unas pocas horas, sin su líder, sin su jefe de seguridad y sin su operador financiero. Les quedan recursos y sicarios, pero no cerebros.
Una casualidad más: hace apenas unos meses, en el mismo edificio en donde fue detenido Dámaso, fue asesinado un coronel del ejército mexicano. Nadie ha explicado si esa muerte tiene relación con el asentamiento del capo en ese conjunto habitacional.
Y otro tema que ese sí, quizás no es una casualidad. También al mismo tiempo que era detenido Dámaso López, un grupo de manifestantes encapuchados atacó las oficinas del Sistema Nacional de Seguridad Pública, a unas pocas calles de donde era asegurado el narcotraficante. Se dijeron “padres de los 43 de Ayotzinapa“, aunque los atacantes, embozados, eran todos jóvenes y nadie los pudo identificar. El hecho es que esa reacción es similar a la que ocurre en otras ciudades del país cuando es detenido algún capo del narco, para distraer autoridades y crear confusión.
La caída de Dámaso López es muy importante. Mueve y obligará a reacomodar muchas cosas en el mundo del narcotráfico, con repercusiones evidentes más allá de lo inmediato. Ya lo veremos en el futuro.
La honestidad valiente
Siguen apareciendo videos de Eva Cadena, la candidata de Morena en las Choapas, Veracruz, y diputada local con licencia de ese partido. Ahora recibiendo un millón de pesos para impulsar una iniciativa de ley en el congreso local. Es el tercer video en el que aparece la candidata de Morena y López Obrador que salió primero en defensa de Eva Cadena y que después, en un largo video, dijo que a Eva la habían “chamaqueado“ y que todo era una artimaña de “la mafia del poder”, ha guardado silencio. Dijimos entonces que chamaqueada o no, lo ocurrido era un delito que se persigue de oficio, mismo que con los nuevos videos se ha multiplicado por tres. Dijimos también que Cadena y López Obrador deben dar una explicación ante las autoridades de qué pasó con ese dinero, si llegó o no a la campaña de Morena.
Tampoco se dan explicaciones verosímiles de los descuentos salariales que la candidata de Morena en el estado de México, Delfina Gómez, hizo a sus policías en el municipio de Texcoco para entregarlos a Higinio Martínez, su jefe político en Morena. Decir que fueron descuentos “solicitados” por los trabajadores es una burla. Pero ni para Eva ni para Delfina ha llegado un solo reclamo de López Obrador, y nunca el líder de Morena se ha dignado explicar qué pasó con esos recursos.