El obispo de San Cristóbal de las Casas, Felipe Arismendi, dijo ?en otras palabras- que mientras las comunidades chiapanecas continúen armadas, no habrá solución al conflicto. Muchos funcionarios y dirigentes políticos pierden la brújula en el tema chiapaneco. Sin desarme no habrá paz. Para avanzar, sin duda se debería trabajar en la posibilidad de lograr acuerdos de paz; el zapatismo no tiene en estos momentos, voluntad para concretar una negociación de este tipo.