Se están sucediendo encuentros de alto nivel pero muy discretos entre funcionarios mexicanos y estadunidenses para tratar de recomponer una agenda que sigue conteniendo algunos de los puntos anteriores a los atentados del 11 de septiembre. Se busca establecer un mecanismo de seguridad regional, que englobe a la Unión Americana y, de alguna forma, permita que las fronteras de México se fortalezcan en el sur y en todos los puntos migratorios del país.