Los escándalos políticos, no han perdido ni un ápice de su capacidad para interrumpir el flujo de los acontecimientos, es la amenaza permanente para aquellos que han consagrado sus carreras a la obtención del poder y al logro del éxito en los juegos de la vida pública. El mayor de nuestros escándalos políticos en curso, es el llamado Pemexgate. La PGR finalmente podría responsabilizar a los presuntos involucrados en el affaire PEMEX-PRI.