Tapado por el escándalo cubano del servilísmo de México ante Estados Unidos, por la oscura elección perredista y las vacaciones de semana santa. El regreso de Carlos Salinas de Gortari a la escena política nacional ha pasado relativamente desapercibido. La presentación de su nuevo prólogo de su libro ha tenido cierta repercusión, le fue bien en Harvard, en Stanford y en Austin, evidentemente está en campaña para lograr reinsertarse en la vida política nacional y ha enfocado todas sus baterias en contra de su sucesor, Ernesto Zedillo.