Hubo, ganadores y perdedores en el presupuesto 2003. Los ganadores son, sin duda, los gobernadores, que demostraron su poder y confirmaron la magnitud del error que cometieron los panistas al no incorporarse a la Confederación Nacional de Gobernadores, la Conago. Los beneficios serán el programa de apoyo al federalismo. Hubo, también grandes perdedores. La Corte no sólo no obtuvo un presupuesto fijo, sino que, además se le redujeron 5 mil millones de pesos sobre lo propuesto originalmente.