Dicen quienes lo conoce, que el nuevo presidente de la Suprema Corte de Justicia, Mariano Azuela Guitrón, es un hombre interesado en avivar el debate y la controversia dentro de la propia Corte. Es verdad, Azuela ha demostrado, con hechos, cómo ciertas decisiones, pese a ser contrarias a sus principios de fe, su responsabilidad está en hacer cumplir con la ley y respaldar la letra y el espíritu constitucional.