17-12-2015 A principios de los 90, Jorge Carpizo lanzó una advertencia a los que llamó narcoperiodistas, comunicadores con estrechas relaciones con los narcotraficantes del momento. Se hicieron muchas suposiciones, se filtró información, alguna de ella aparentemente cierta, otra descabellada, pero lo cierto es que no hubo un solo caso que se hiciera público y mucho menos se juzgara. La acusación sí sirvió para acerca o alejar de la esfera del poder a algunos periodistas en un proceso de renovación en medios (de mandos y comunicadores) que impulsó el gobierno de Carlos Salinas.
Yo no recuerdo que, posteriormente, el director de algún periódico haya sido abierta y públicamente acusado de narcotráfico. Hasta ayer, que el departamento del Tesoro de Estados Unidos, informó que colocó al empresario mexicano Naim Libien Tella y a sus empresas, incluyendo el periódico unomásuno y Diario Amanecer de Toluca, como “narcotraficantes especialmente designados” por su sociedad con el cártel de los Cuinis (socios y familiares del Cártel Jalisco Nueva Generación), y su líder Abigail González Valencia.
Es verdad que, para quienes trabajamos muchos años en el viejo unomásuno, convertido en los 80 e inicios de los 90 en un periódico de referencia en México, ese medio hoy resulta irreconocible desde cualquier punto de vista. Sólo queda un cabezal en un espacio descaradamente amarillista de un medio de donde surgieron muchos de los principales periodistas, columnistas, fotógrafos, editores, artistas del México de hoy, donde se dieron muchos de los más importantes debates que acompañaron tanto el proceso de transición como de la transformación cultural que lo acompañó. Desde mediados de los 90 el unomásuno comenzó una declinación que lo llevó a terminar en las manos de Libien Tella y que lo convirtieron en un pasquín imposible de leer. Quién sabe, incluso hoy, qué pasó con el enorme y valiosísimo archivo de aquellos años de esplendor del unomásuno.
Si algo faltaba en ese proceso de decadencia, plagado de amenazas de sus propietarios contra otros medios y comunicadores e incluso contra funcionarios que no les otorgaban la publicidad que deseaban, es la acusación, la sanción aplicada ayer por el gobierno de Estados Unidos a sus propietarios. El texto, divulgado por el departamento de Estado, no deja lugar a dudas o interpretaciones. “Hoy, dice, el Departamento del Tesoro de Estados Unidos designó al ciudadano mexicano Naim Libien Tella y a cuatro empresas mexicanas como Narcotraficantes Especialmente Designados de conformidad con Ley de Designación de Cabecillas Extranjeros del Narcotráfico (Ley Kingpin). Naim Libien Tella apoya las actividades de narcotráfico de la organización mexicana Los Cuinis y de su líder, Abigael González Valencia… Las entidades designadas hoy, que incluyen al periódico unomásuno ubicado en la Ciudad de México, brindan apoyo a las actividades de tráfico de drogas de Los Cuinis. Son propiedad o están controladas por González Valencia y/o Libien Tella. Como resultado de la acción de hoy, todos los bienes e intereses de estas entidades e individuos en jurisdicción de los Estados Unidos quedan congelados, y a los ciudadanos estadounidenses les queda prohibido participar en transacciones con ellos”.
“A través de su relación con Naim Libien Tella, continúa el comunicado, la organización de tráfico de drogas Los Cuinis ha utilizado el periódico mexicano unomásuno para impulsar sus actividades de tráfico de droga”, expresó el Director Interino de la OFAC, John E. Smith… Naim Libien Tella, el vicepresidente de unomásuno, ha tenido una larga relación personal con González Valencia, que ha estado involucrado en el narcotráfico desde la década de los noventa… En 2007, González Valencia, le otorgó poder notarial a Libien Tella de su empresa de inversiones ubicada en Guadalajara: Valgo Grupo de Inversión. Valgo Grupo de Inversión también fue designada hoy por ser propiedad y/o estar controlada por González Valencia y/o Libien Tella. Más recientemente, Libien Tella y unomásuno han brindado apoyo para las actividades de tráfico de droga de González Valencia y Los Cuinis…Otras empresas que fueron designadas hoy, concluye el comunicado, incluyen a una empresa localizada en Toluca, el Diario Amanecer, un periódico mexicano, y Aerolíneas Amanecer, una empresa de taxi aéreo. Ambas entidades son propiedad o están controladas o actúan en representación de Naim Libien Tella”.
Hasta ahí las autoridades estadounidenses. Debe venir ahora la acción de las autoridades mexicanas que, según el comunicado del departamento del Tesoro, colaboraron con ellos y con la DEA en la investigación sobre estos socios del cártel de los Cuinis. Ojalá que se haga justicia y algo de lo que fue el unomásuno, el auténtico, aquel en el que tantos aprendimos y trabajamos, regrese del lodazal en lo que estos personajes, consignados ayer por los tribunales estadounidenses, lo han enterrado.