El fin del actual sistema de partidos
Columna JFM

El fin del actual sistema de partidos

29-06-2018 Nadie saldrá indemne del previsible resultado electoral del domingo. Todos los partidos políticos sufrirán una transformación tal que será difícil reconocerlos dentro de algunos meses, ya que los cismas, las redefiniciones, los equilibrios internos se han roto en esta campaña, incluso entre los ganadores, y no sólo tendremos un nuevo presidente, un nuevo congreso, nueve nuevos gobernadores y 28 congresos estatales, además de centenares de nuevos alcaldes, tendremos un nuevo sistema del partidos, donde más allá de las siglas (que difícilmente se perderán porque de la mano con ella van los spots y los recursos) habrá nuevos jugadores.

 

Comencemos por Morena. La posibilidad real del triunfo obligará a definiciones profundas en esa fuerza política que, como hemos dicho muchas veces, no es un partido, es un movimiento donde caben todos. Pero que quepan todos desde la oposición es mucho más fácil que a la hora de gobernar. Decidir con quiénes gobernar, a quiénes darle el partido, con qué sectores avanzar y con quienes mantener una relación sencillamente testimonial no es fácil ni sencillo cuando existen tantos intereses contradictorios en un mismo saco. Mucho del futuro de Morena, dependerá de lo que suceda entre el 2 de julio y el primero de diciembre próximos.

En el PAN nada puede ser más explícito que el desplegado que publicaron siete de sus gobernadores. Los mandatarios de Aguascalientes, Martín Orozco; de Baja California Sur, Carlos Mendoza Davis; de Durango, José Rosas Aispuro; de Puebla, José Antonio Gali; de Querétaro, Francisco Domínguez; de Quintana Roo, Carlos Joaquín González y de Tamaulipas, Francisco Javier García Cabeza de Vaca, anunciaron la creación de la Asamblea de Gobernadores de Acción Nacional (GOAN), presentándolacomo un espacio para el diálogo incluyente, el análisis, el intercambio de ideas y la búsqueda de acuerdos en beneficio de la población de sus estados, con el gobierno que nazca el primero de julio. En los hechos se están colocando como interlocutores del panismo ante la nueva administración (e incluso ante la saliente) porque después de los comicios buscarán recuperar un partido que en esta campaña terminó desfigurado. Por supuesto que no pretenden hacerlo con su actual dirigencia. Anote para ese proceso, además de los gobernadores y ex gobernadores como Rafael Moreno Valle, dos nombres: Roberto Gil y Diego Fernández de Cevallos.

Pero los cuatro que no firmaron ese desplegado también tienen agenda. Javier Corral quiere para sí el monopolio de la oposición panista en el futuro, desde una estrategiaparecida, pero enfrentada por las respectivas personalidades y visiones, a la que ejecutó López Obrador en el pasado. Miguel Márquez se siente el representante del panismo localmente más poderoso y más tradicional. Miguel Angel Yunes depende de los resultados del domingo, pero si llegara a ganar su candidato sin duda se trazará un futuro propio, mientra que Antonio Echevarría, por formación y herencia, querrá mantenerse equidistante de todos.

Una de las grandes novedades del cierre de la campaña fue la decisión del gobernador de Chiapas, Manuel Velasco, de aceptar la candidatura al senado, registrado en el número dos de la lista plurinominal del partido Verde. Lo puede hacer amparándose en la interpretación de la decisión del Tribunal Electoral que autorizó la candidatura de Miguel Angel Mancera por el Frente. Vendrá, si es así, una reconfiguración del PVEM, incluso en sus acuerdos y alianzas.

EL PRI viene soportando tensiones desde hace meses. La llegada de René Juárez a la presidencia del partido ha logrado atemperar hasta pasadas las elecciones todas esas tensiones internas, pero después del domingo esas mismas presiones crecerán y lo seguirán haciendo en la misma medida en que se acerque el final del mandato del presidente Peña.

El PRD en los últimos días de la campaña sufrió la renuncia de dos personajes centrales en su historia, la ex gobernadora de Zacatecas y ex presidenta del partido, Amalia García y de una de sus fundadoras, la maestra Ifigenia Martínez. Son sólo síntomas de un mal mayor que devino de no atreverse a competir con su propia personalidad.

¿Qué sucederá con el Partido Encuentro Social?. Su dirigente Eric Flores ha dicho en más de una oportunidad que en realidad aspira a reemplazar en el escenario político nada menos que al PAN. No se ve hoy que semejante tarea sea posible, pero ahí van y habrá que contar con su presencia en el nuevo escenario, sobre todo desde su ala derecha.

También Nueva Alianza y el PT tendrán desafíos importantes. El primero de definir su personalidad propia, el segundo de ver cómo se cobija bajo el ala de Morena sin ser absorbido por el propio movimiento. Mientras que MC podría contar por primera vez con espacios de poder propios que tendrá que decir cómo hacia dónde los juega. Lo cierto es que a partir del domingo en el sistema de partidos nada será igual: la única duda es cuánto tardará esa transformación y cuánto perderán o ganarán cada uno de los partidos en ese lapso, dependiendo, en mucho, de la rapidez de su capacidad de reacción.

Por cierto, el domingo vote, la única alternativa real de transformación es el voto.

 

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