Los esfuerzos de limpieza en Guerrero continúan en curso, mientras que la reactivación económica avanza lentamente. Los residentes de Acapulco han expresado su dificultad para abastecerse de medicamentos y gasolina, teniendo que trasladarse hasta Chilpancingo para obtener suministros esenciales. La situación en los hospitales es crítica, con reportes de pacientes atendidos en condiciones precarias.