De aquí al 15 de noviembre se vivirá un larguísimo mes para los procesos internos de los partidos políticos pero, al mismo tiempo, las cosas están avanzando tan rápido que para entonces, cuando se comiencen a establecer con toda claridad precandidatos y mecanismos de elección, mucho ya estará definido.
De aquí al 15 de noviembre se vivirá un larguísimo mes para los procesos internos de los partidos políticos pero, al mismo tiempo, las cosas están avanzando tan rápido que para entonces, cuando se comiencen a establecer con toda claridad precandidatos y mecanismos de elección, mucho ya estará definido.
En estos días en el PRI se tendrá que establecer con claridad el mecanismo de elección y de la mano con ello la integración definitiva del Consejo Nacional que sesionará este fin de semana. Hay varios procesos en marcha en el PRI. Respecto a la candidatura presidencial tienen que terminar de fijar qué tipo de negociación se realizará entre Manlio Fabio Beltrones y Enrique Peña Nieto. Según fuentes muy cercanas al ex gobernador mexiquense, Manlio tiene hoy una participación, si fueran a una elección interna en el priismo, de aproximadamente un 5 por ciento de los votos, pero su influencia en términos políticos, en mandos y liderazgos del partido, estaría en torno al 20 por ciento. Entonces, la negociación que se da entre Manlio y Peña, para posiciones y espacios para el 2012, pasa por equilibrar ese 5 con ese 20 por ciento que cada uno de ellos, obviamente, valora de forma diferente.
Esto se debe definir en los próximos días porque hay que resolver el proceso interno y habrá que ver si Manlio desea ir a una elección interna o no. En el PRI saben que deberían impulsar una competencia interna porque de otra forma tendrían con muy poca exposición pública a Peña prácticamente hasta febrero próximo. Pero si Manlio no participa habrá que ver si se consigue que alguien juegue el papel de contrincante del mexiquense: se dice que un ex gobernador podría jugar ese papel. Por lo pronto, pasada la reunión del Consejo, el próximo lunes comenzarán participaciones públicas de Beltrones y Peña en los distintos foros que está organizando la Fundación Colosio.
Pero esto también es importante porque para cuando comience la segunda quincena de diciembre tendrían que estar definidos los candidatos a senadores y diputados. No se quiere pasar de esa fecha para no contaminar los procesos internos. Pero no sólo los candidatos del PRI, porque además de las cuotas internas se deben negociar espacios para los dos muy probables aliados que tendrá el PRI en esa elección: el Partido Verde y Nueva Alianza. Si es así, la coalición se deberá firmar máximo el 18 de noviembre. Una cosa dicen que es cierta, salvo alguna excepción muy notable, ninguno de los ex gobernadores que buscan una senaduría podrán ocupar esos espacios. La decisión, por lo menos en el equipo más cercano a Peña, es que esas posiciones irán a cuadros más jóvenes. Habrá que ver si la realidad lo permite.
Mientras tanto en el PAN, las encuestas, cuando estamos a un mes de que se deban definir con claridad las candidaturas, siguen favoreciendo a Josefina Vázquez Mota. Existe una diferencia importante entre la ex secretaria de Educación Pública y los otros dos aspirantes panistas, Santiago Creel y Ernesto Cordero, misma que se amplía mes con mes. Creel no ha crecido y tiene una tendencia a la baja mientras que Cordero es hoy más conocido pero no aumentó, por lo menos en septiembre, en preferencias electorales, todo esto según la última encuesta de Mitofsky, que coincide con otros estudios que se han realizado.
En el PRD, mientras entre población abierta la distancia entre López Obrador y Marcelo Ebrard es muy pequeña, cuando se analiza a los simpatizantes perredistas, la brecha se amplía mucho a favor del tabasqueño, eso vuelve a poner en el debate ya no el método de selección del candidato de la izquierda (que será a través de encuestas) sino a quienes se aplicará: si a la población abierta o sólo a quienes se digan simpatizantes de esa corriente. Y en ese contexto se fortalece López Obrador.
En este escenario no parece desatinado el pronóstico que hizo Humberto Moreira días pasados, de que los candidatos del PRD y del PAN serían López Obrador y Josefina Vázquez Mota, respectivamente. La única diferencia es que siempre habló del “tapadito” que tenían en el PRI y allí hay menos dudas que en sus contendientes de que el candidato será Peña Nieto.
Por lo pronto, habrá que estar atentos a lo que suceda el 13 de noviembre en Michoacán. Las encuestas internas de los partidos no coinciden con otros estudios y allí ven mucho más cerrada la elección que lo que se percibe públicamente, sobre todo en el caso de Luisa María Calderón. Habrá que esperar los resultados en fechas más cercanas a los comicios.