Campaña sin sorpresas ni reglas
Columna JFM

Campaña sin sorpresas ni reglas

14-04-2015 Comenzó formalmente la campaña electoral con muchas más sombras que luces, en un contexto en el cual los partidos, como dijo ayer el consejero Ciro Murayama, se quejan de lo que les hacen pero ellos hacen lo mismo con sus adversarios. No hay entre los 13 millones de spots que se trasmitirán hasta el 7 de junio uno solo que tenga alguna propuesta concreta que vaya más allá del ataque al adversario, en ocasiones confrontándolo, en otras difamándolo o descalificándolo. Mejoran las campañas sólo un poco cuando se trata del discurso personal de los candidatos, pero no tenemos, es un hecho, ninguna confrontación de ideas o propuestas, y lo que sí tenemos es el proceso electoral más caro de la historia y, hoy por hoy, uno colmado de incertidumbres.

Los partidos desde la elección del 2006 parecen tener secuestradas a las autoridades electorales y su peso es cada día mayor a la hora en que el INE o el Trife deben tomar decisiones. No tienen voto en esos organismos pero ejercen un control de facto que está determinado por un solo hecho: aunque las leyes digan otra cosa, los consejeros saben que no es verdad que sean inamovibles en sus cargos. Los consejos del 2007 y el que operó hasta el año pasado, fueron destituidos y hoy el INE se ha constituido claramente con consejeros que son parte de cuotas de los partidos, que incluso utilizan ese argumento en sus propios debates, deslegitimando al árbitro que ellos mismos eligieron.

Las durísimas sanciones al partido Verde, justas o no, no se han visto correspondidas con sanciones equivalentes a otros contendientes y las exigencias a los medios de comunicación (ahora según el INE no se puede ni siquiera avisar a las audiencias de que vienen tandas de anuncios publicitarios de partidos políticos, por la sencilla razón de que a los partidos no les gusta) no son análogas a las que los propios partidos tendrían que hacerse a sí mismos. Hay multas enormes para algunos por no respetar las normas pero ninguna por realizar actos adelantados de campaña, como ocurre con López Obrador y Morena.

Las campañas de contrastes están permitidas pero las de difamación no, dice también Murayama, pero lo cierto es que la distancia entre una y otra se pierde, y como los partidos no pagan por los espacios no tienen problema alguno en utilizar los spots que crean necesarios para atacar o difamar a sus adversarios: saben que la peor sanción que pueden recibir es que se saque el spot del aire…después de varios días de ser trasmitido. Esa será la norma hasta el siete de junio y ya verá usted como se acrecentará esa tendencia. Porque sencillamente no tiene costo para nadie eludir una ley que no se puede hace cumplir.

Los números electorales, más allá de la aparición de encuestas que resultan, en algunos casos, por lo menos sospechosas, lo cierto es que no se han movido demasiado, con un PRI y un PAN que van bastante por delante en términos electorales y una lucha entre el PRD, el Verde y Morena por las tres siguientes posiciones muy intensa y Nueva Alianza que, de acuerdo a las encuestas serias, parece haber superado los porcentajes necesarios para el registro. Los demás, quizás con la excepción de Movimiento Ciudadano, parecen están condenados a desaparecer (¿no le resulta descabellado que algunas encuestas digan que Encuentro Ciudadano o el partido Humanista podrían tener hasta 4 por ciento de votos?).

En los estados dudo que haya sorpresas. Quizás, una elección atípica es la de Nuevo León, por la irrupción de El Bronco, Jaime Rodríguez, un candidato independiente de origen priista que está dando la pelea, sobre todo al PAN y a su candidato, Felipe de Jesús Cantú. La priista Ivonne Alvarez, parece tener un margen mayor, unos diez puntos, pero no se tendría que confiar porque si El Bronco crece otros cinco punto en el primer mes de campaña, la tendrá a tiro de piedra. Pero la suya es también una campaña que puede ser muy vulnerable. En Querétaro, el panista Pancho Domínguez supera por poco, pero la tendencia crecerá, al priista (con orígenes panistas) Roberto Loyola, pese a lo bien calificado que está el gobernador José Calzada. En Sonora, la priista Claudia Pavlovich la tendrá difícil para superar al panista Javier Gándara. San Luis Potosí será una elección disputada, pero puede ser para el PRI, como sin duda lo será Campeche, igual que Baja California Sur para el PAN. En Guerrero, la división de la izquierda y el costo de Ayotzinapa, le dan posibilidades altas al priista Héctor Astudillo, mientras que en Michoacán, la verdadera disputa está entre Silvano Aureoles y Luis María Calderón. En la lucha por el DF es previsible, deseable, que el jefe de gobierno, Miguel Mancera salga bastante más fortalecido que en la actualidad.

Comenzó una campaña que no tendrá sorpresas, y que determinará nuevos equilibrios políticos entre protagonistas que no quieren respetar las reglas que ellos mismos se han impuesto.

 
 

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