06-04-2016 La plática telefónica del representante legal de los familiares (cada día de menos) de los jóvenes secuestrados en Iguala el 26 de septiembre de 2014, Vidulfo Rosales, con el padre de uno de ellos no tiene desperdicio. Transcribimos una parte de ella:
“Mario César González Contreras (padre de uno de los jóvenes desaparecidos), pues ya me amenazaron, Guerreros Unidos a mí.
Vidulfo Rosales (abogado): ¿Guerreros Unidos?
Mario: ajá.
Vidulfo: ¿qué le dijeron?
Mario: que entreguemos ese puto dinero, yo [le dije] qué tengo que ver, qué tengo que ver. [Me contestó] tampoco te pongas pendejo hijo de la chingada, ya te dije: que le digas a esa mierda y a los otros putos que se juntan con él que entreguen ese puto dinero porque si no los voy a levantar… aquí tengo los mensajes y me hablaron por teléfono.
Vidulfo: ¿cuándo le hablaron? ¿Hace un rato?
Mario: hace un rato…
Vidulfo: ¿pero qué le dijeron? ¿Así le dijeron? Eso, que le regresaran el dinero o qué le dieron a él…
Mario: que les repartieran… que le entregara a los padres los 200 mil pesos, porque si no, me va a levantar, o sea, que nos iban a levantar, que yo también y yo digo: ¿yo por qué? le digo. Si el único que ha sido más derecho con los padres soy yo, ¿qué me tienes que meter? Me dice: ‘Nosotros agarramos parejo güey y de una vez te lo decimos, si no entregan ese puto dinero ya valieron…’.
Vidulfo: Está cabrón…”.
Entrevistado sobre el tema, Rosales dijo que el dinero del que hablan son 200 mil pesos que les dio el INAH (¿por qué diablos una institución pública como el INAH destina dinero de su presupuesto a actos proselitistas?) y que hay diferencias entre los familiares porque alguien se los quedó, aunque la grabación lo que da a entender es que el dinero proviene de los propios Guerreros Unidos. A eso siguió un texto atribuido a Los Rojos, los rivales de Guerreros Unidos, donde dicen que la grabación es la demostración de que Vidulfo y ese grupo de familiares trabaja con Guerreros Unidos.
Sonaría, por lo menos, extraño asumiendo que Guerreros Unidos son los que secuestraron y mataron a los jóvenes, pero lo cierto es que si se desarrolla la línea que esos familiares (y el GIEI) impulsan (la de fue el Estado y no hubo ni asesinato ni incineración y queremos que los regresen con vida) los primeros que quedarán en libertad son los 136 policías, funcionarios municipales y sicarios que cometieron el crimen y que pertenecen… a Guerreros Unidos.
El tema para muchos de los que están participando en esta historia es simplemente el dinero y una lucha sorda de poder detrás. Los jóvenes de Ayotzinapa fueron secuestrados, asesinados y muchos de ellos incinerados por una lucha entre cárteles, entre los Guerreros Unidos y Los Rojos, con sus respectivos coadyuvantes políticos y policiales detrás. Los primeros estaban convencidos de que con los estudiantes venían integrantes de los segundos. Por supuesto que los 43 jóvenes, la mayoría de primer ingreso en la Normal, no tenían nada que ver con Los Rojos, pero sí algunos de los jóvenes y de los mandos de la escuela. Los sicarios los mataron a todos, sin distingos. Ahora los padres, gente humilde en su enorme mayoría, sin formación y salvo unos pocos sin militancia política alguna, están en peligro de encontrarse en otra trinchera, pero en medio de esa misma disputa.
LA HIJA QUE NO FUE
Rosa Isela, la supuesta hija de El Chapo Guzmán, lo confirman las agencias estadunidenses y mexicanas, no es descendiente de Guzmán Loera, sino de un señor González. Está registrada como tal desde 1976 en Tijuana y todo se transformó en una mentira más en la campaña de relaciones públicas de El Chapo. El problema es que la mujer dijo, supuestamente, que El Chapo había sido traicionado por El Mayo Zambada y eso podía generar una guerra dentro del propio cártel de Sinaloa. Había que deslindarse de ella. Ha sido desenmascarada, pero es otra mentira más que se publica como cierta. Lo vergonzoso es que los medios que divulgaron esa noticia, esa supuesta entrevista, no tuvieron el mínimo cuidado, una exigencia periodística básica, de confirmar que la persona con la que estaban hablando era quien decía ser. Una copia de un acta de nacimiento expedida hace apenas un año para una mujer de casi 40 años es la más sospechosa de las confirmaciones. Pero ése es periodismo militante y, por lo tanto, políticamente correcto.
MISOGINIA
No la conozco y no tengo la menor idea de sus capacidades políticas, si es que éstas existen. Pero que se condene a la candidata del PT a un distrito local de Zacatecas, Giselle Yunuen Arellano, por haber sido modelo y haber posado para publicidad en lencería, me parece ridículo. La joven, que además hace tres años había sido candidata al mismo distrito, pero por el PAN local (que ahora la condena) tiene razón en calificar a sus acusadores como misóginos y en decir que ser modelo o edecán es un trabajo tan respetable como cualquier otro. Lo demás, que lo decidan los electores zacatecanos.