12-05-2016 Sigo pensando que en las elecciones de junio se van a jugar muchas cosas, pero que salvo situaciones muy específicas, como la de Manlio Fabio Beltrones, presidente del PRI, Rafael Moreno Valle, gobernador de Puebla o el dirigente panista Ricardo Anaya, los demás presidenciables para el 2018, no tendrán, personalmente, tanto en juego, aunque por supuesto que el resultado, hoy impredecible en la mayoría de los estados, terminará determinando muchos de los equilibrios políticos internos y externos.
Más que las encuestas, algunas evidentemente reales, otras manipuladas, para ver la evolución (y sobre todo la percepción) de los presidenciales, me parece que el estudio que mes con mes realiza la agencia Central de Inteligencia Política sobre aparición en medios, con mensajes positivos, negativos y neutros, de los aspirantes, estableciendo además una suerte de valor comercial para cada aparición que sirve para medir equitativamente a todos, es un instrumento mucho más útil.
En el estudio, publicado ayer en El Financiero lo que me sigue sorprendiendo es lo bien que continúa posicionada Margarita Zavala. Cuando se establece lo que llamamos la opinión efectiva, o sea cuando se obtiene la diferencia existente entre las notas positivas y las negativas, su distancia con todos los demás aspirantes es notable: obtiene un 67.22 por ciento de opiniones favorables. Su más cercano es José Antonio Meade, con un 39.67 por ciento y esa es también una novedad, porque el secretario de Desarrollo Social sigue creciendo y apareciendo, al igual que Zavala, casi sin negativos, en un ambiente en el cual, por ejemplo, Miguel Angel Mancera (gracias al Hoy no Circula) tuvo negativos muy altos en abril, lo mismo que Jaime Rodríguez El Bronco (quien simplemente no levanta), o Moreno Valle (atado por la elección estatal) o Luis Videgaray (atado pero a la economía). Aurelio Nuño con muchas menciones se mantiene en equilibrio entre positivos y negativos, Eruviel Avila no aparece y la que sí comienza a despuntar es la canciller Claudia Ruiz Massieu.
Es interesante ver también cómo, efecto de la campaña, Manlio Fabio Beltrones tuvo mucha exposición con un 21.78 por ciento de diferencial entre negativos y positivos, a su favor. Lo superó Miguel Angel Osorio, que se sigue manteniendo con buenos números en encuestas y opiniones, en este caso un 21.78 por ciento de impactos positivos más que los negativos, mientras que López Obrador sigue teniendo negativos pero menos que el mes pasado. En este mes su opinión efectiva fue del 17.91 por ciento, aunque si se analiza el periodo enero-abril tuvo 18 impactos positivos contra 33 negativos. El resto de la información fue neutral. Aunque a diferencia de todos los demás, López Obrador tiene la ventaja de contar con cientos de miles de anuncios de televisión y radio gratuitos que le hacen mucho menos necesaria (e incluso prescindible) su aparición noticiosa en medios.
¿Qué es lo que queda de todo esto?. Primero, que la distancia que sigue existiendo en el PAN entre Margarita Zavala y los demás aspirantes es muy grande y ello se refleja, además, en su muy activa participación (lo mismo que la de Felipe Calderón) en prácticamente todos los mítines de los candidatos panistas en los estados. Y eso no le generará costos, sólo beneficios de cara al futuro. En el PRI, Osorio sigue con una posición equilibrada entre encuestas y medios, mientras que Aurelio Nuño se mantiene también en equilibrio pero sin un crecimiento importante (pese a que en abril fue el que más exposición tuvo en medios, junto con Mancera) pero el que comienza a despuntar en forma interesante es José Antonio Meade, y en menor medida, Claudia Ruiz Massieu.
Para Manlio, a diferencia de todos los demás, su futuro está determinado por los resultados del 5 de junio. En el PRD ha sido un mal mes para Mancera por todo lo derivado de la contingencia ambiental y los no circula, mientras que López Obrador continúa recorriendo sin contratiempos su camino, con sus positivos y negativos tradicionales. Por lo pronto, durante abril los nombres, salvo la progresiva aparición de Meade, siguieron siendo los mismos. A ver cómo quedan las cosas después del cinco de junio.
Fox y la narco Cocopa
Estoy lejos de subestimar al presidente Vicente Fox. Nadie que haya derrotado limpiamente al PRI luego de siete décadas en el poder puede o debe ser subestimado. Pero me cuesta entender porqué, como lo viene planteando hace ya algunos años, sigue insistiendo en una negociación con el narcotráfico equiparándola con la que hizo Carlos Salinas de Gortari con el EZLN. Son fenómenos, el narco y el zapatismo, completamente diferentes y hasta antagónicos, y me sigo preguntando qué se negociaría con los capos del narco y qué resultado podría salir de esa negociación con grupos criminales. Confieso que no lo entiendo.