30-03-2017 La detención en San Diego del fiscal general de Nayarit, Égar Veytia, acusado de introducir droga en Estados Unidos ligado con el Cártel Jalisco Nueva Generación, es la confirmación de un rumor que desde hace años habían hecho suyo los nayaritas respecto a la relación del fiscal con el narcotráfico y la enorme corrupción que se registró en esa institución en los últimos años. La fiscalía es utilizada para golpear, extorsionar, se pagaba con terrenos, propiedades, recursos y en el centro de esas versiones y denuncias siempre estaba el fiscal Veytia.
Hace unos años, 2012, fuimos a investigar en Nayarit la detención de un joven empresario, Eduardo Valencia, que tenía un duro pleito legal con un grupo de inversionistas canadienses apoyados por el gobierno del estado y, sobre todo, por el fiscal, entonces procurador Veytia, por unas propiedades inmobiliarias en Nuevo Vallarta. No puedo juzgar si se había cometido un delito o no, aunque lo que se percibía en el expediente era que no se trataba más de una venganza que de un deseo de hacer justicia. El empresario había sido detenido literalmente a la mala, más allá de lo complejo del caso, nos pidió que investigáramos su caso. Eso hicimos.
El reportero de Todo personal que fue a Tepic y Nuevo Vallarta se encontró con durísimas amenazas de la fiscalía, que luego se hicieron extensivas a un servidor, acompañadas de una campaña impulsada por Veytia en medios locales contra el programa Todo personal y sus conductores y terminaron con un recrudecimiento de las condiciones carcelarias del empresario. El propio Veytia nos amenazó judicialmente a través de una carta, simplemente, por haber aireado uno de los muchos casos de aparente corrupción judicial en el estado. A la familia del empresario, el fiscal, simplemente, les dijo que como habían aireado su tema en los medios les costaría mucho más sacarlo de prisión. Por lo pronto, la última información que tuve sobre ese caso es que al empresario le había costado todo su patrimonio tratar de salir de prisión y todavía permanecía detenido.
Ésa era una historia particular. Más allá de eso la importante era el control del Cártel Jalisco Nueva Generación sobre el estado. De ser cómplice de ese cártel se acusa al fiscal en Estados Unidos. Pudo ser detenido porque tiene doble nacionalidad y su caída puede ser, además, un golpe definitivo para el gobierno de Roberto Sandoval y para el Partido Revolucionario Institucional en el estado de cara a las elecciones de junio próximo.
El Partido Revolucionario Institucional está en una mala situación electoral porque el gobierno de Sandoval no ha dado los resultados que se esperaba, porque el propio gobernador está distanciado del candidato priista, Manuel Cota, y porque la alianza PAN-PRD, lleva como candidato a Antonio Echevarría, hijo del exgobernador homónimo, con fuerte presencia en el estado: Tonio fue el primer gobernador de oposición en Nayarit, un empresario muy cercano a Vicente Fox que hace 18 años dejó el PRI para ir por una alianza opositora. Su esposa, la madre del actual candidato, Martha Elena García, es senadora por el Partido Acción Nacional. Existe además un fuerte candidato de Movimiento Ciudadano, Raúl Mejía, y recordemos que la gente de Enrique Alfaro, alcalde de Guadalajara, controla casi todas las grandes ciudades de Jalisco y quieren extender ese control político a Nayarit.
En ese escenario electoral, la caída del fiscal Veytia detonará las denuncias contra un gobierno local que, en la conferencia de prensa de ayer, no pudo, siquiera, explicar con claridad la situación legal del fiscal. Mientras que en Estados Unidos se confirmó que está encarcelado acusado de participar en una red para introducir drogas en ese país por un tribunal de Miami.
Lo importante, en todo caso, es que se comience a hacer justicia con uno de los fiscales estatales con mayores acusaciones de corrupción del país.
EL OTRO DUARTE
En medio de una fuerte crisis de seguridad, la mayor de los últimos años, con el asesinato de la periodista Miroslava Breach en puerta, el gobernador Javier Corral decidió proceder contra su antecesor César Duarte. No sé si Duarte cometió o no algún delito, pero resulta evidente que Corral activó esa denuncia penal para tratar de distraer a la opinión pública de la crisis que sufre su estado.
EDGAR ELÍAS, FIN DE UNA ETAPA
Edgar Elías Azar deja el Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México habiendo cumplido sus principales compromisos: sacó adelante la implementación de la reforma judicial en la capital del país y, con todos sus desafíos, deja un sistema de justicia en la ciudad mucho más consolidado que el que recibió. No creo, como se ha especulado, que se vaya confrontado con el jefe de Gobierno Miguel Mancera. Al contrario, más allá de cualquier desavenencia coyuntural, el suyo con el jefe de Gobierno es uno de los mejores ejemplos de colaboración y autonomía entre poderes. Ha sido propuesto como embajador de México ante los Países Bajos. Ojalá lo sea.