La política chatarra y las comisiones investigadoras
Columna JFM

La política chatarra y las comisiones investigadoras

Ya lo había propuesto el líder del senado, Manlio Fabio Beltrones y también Marco Antonio Bernal y lo ratificó la fracción del PRI en un punto de acuerdo urgente: ?Se somete a la consideración de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, la conformación de una comisión investigadora para la debida aclaración del caso Zhenli Ye Gon, empresario nacido en China y naturalizado mexicano?. Ni una palabra respecto al detalle de que ?el ciudadano chino naturalizado mexicano?está acusado de narcotráfico, ni mucho menos de que se encontraron en su domicilio 205 millones de dólares y que en México están detenidos por lo menos once cómplices del honesto ciudadano.

Ya lo había propuesto el líder del senado, Manlio Fabio Beltrones y también uno de sus hombres de confianza, el diputado Marco Antonio Bernal y lo ratificó la fracción del PRI en un punto de acuerdo urgente: "Se somete a la consideración de la Comisión Permanente del H. Congreso de la Unión, la conformación de una comisión investigadora para la debida aclaración del caso de Zhenli Ye Gon, empresario nacido en China y naturalizado mexicano". Ni una palabra respecto al detalle de que “el ciudadano chino naturalizado mexicano” está acusado de narcotráfico, ni mucho menos de que se encontraron en su domicilio 205 millones de dólares y que en México están detenidos por lo menos once cómplices del honesto ciudadano.

Ya en varias oportunidades hemos insistido en que la construcción de comisiones investigadores en el congreso llega al límite del ridículo: los diputados quieren hacerle al ministerio público, utilizan tiempo y dinero, hacen muchas declaraciones y jamás han llegado a nada. Un ejemplo, en el caso Bribiesca: llevan cuatro comisiones diferentes y nunca han podido concluir algo. Pero las comisiones sirven como plataforma para operaciones sucias, para la política chatarra, por eso se las mantiene. Lo cierto es que mientras existen innumerables iniciativas sin analizar, los diputados y senadores se divierten con comisiones investigadores de temas que no son, siquiera, de su competencia.

Ya que los diputados priistas quieren conformar una comisión investigadora sobre el caso Ye Gon, para ser justos habría que proponer varias más, ya que acusaciones inverosímiles (y otras mucho más creíbles) se hacen cotidianamente. Vamos con algunos ejemplos: que se forme una comisión investigadora porque desde hace años los periodistas estadounidenses Julia Preston y Sam Dillon han acusado al ahora líder del senado, Manlio Fabio Beltrones de ser “socio” del narcotraficante Amado Carrillo: se basaron para ello en un documento oficial de la oficina antinarcóticos de El Paso. Ni la información ni el documento tenían una sola prueba sólida en ese sentido, pero los periodistas recibieron el premio Pulitzer por ello. Es más, si nos basamos en su libro El despertar de México, la mitad de la clase política mexicana tendría que ser indagada por una o varias comisiones investigadoras.

La cámara de diputados puede formar una comisión investigadora para indagar a Emilio Gamboa Patrón, al que alguna vez lo acusaron, al igual que a Manlio sin prueba alguna, de relaciones con el narcotráfico porque alguien divulgó una grabación telefónica donde hablaba con una joven que a su vez estaba relacionada con un delincuente. No hay pruebas pero el caso amerita una comisión.

Qué decir del gobernador Félix González Canto de Quintana Roo. La prestó el avión del gobierno del estado a la esposa de Mario Villanueva para trasladarse y organizó las manifestaciones en defensa de ese ilustre quintanaroense que Estados Unidos quiere juzgar en Nueva York. Hay que investigar al gobernador. Debe tener su comisión. Ni hablar del autoatentado del hoy diputado José Murat, documentado por la PGR pero ignorado por la justicia local. Es necesaria una comisión investigadora.

Por supuesto que no puede quedar fuera el aspirante a candidato en Baja California, Jorge Hank Rhon: no sólo fue investigado en varias ocasiones por la justicia estadounidense sino que además está acusado de ser el autor intelectual del asesinato del periodista Héctor Félix Miranda, fundador del semanario Zeta. Su jefe de custodias, Antonio Vera Palestina está preso, condenado por ese hecho, y el hijo de éste es actualmente el jefe de custodias del alcalde con licencia. El caso es tan grave que ha sido asumido hasta por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos. ¿Por qué no una comisión investigadora en la cámara de diputados?.

En Tabasco ha quedado demostrado que buena parte de los mandos policiales de las administraciones de Roberto Madrazo y Manuel Andrade conformaban algo que se llamaba la Hermandad y que manejaba el narcotráfico en la entidad y la región. Los hechos están plenamente comprobados y denunciados por el gobernador Andrés Granier y las autoridades federales. ¿Por qué no iniciar una comisión investigadora para analizar si los dos ex mandatarios tuvieron o no conocimiento de esos hechos?

Tampoco dejemos en el archivo casos aún no resueltos: en muchas ocasiones se ha publicado, sin mostrar prueba alguna, que Carlos Salinas ordenó el asesinato de Luis Donaldo Colosio; otros han dicho que en realidad ese asesinato lo ordenó el fallecido Fernando Gutiérrez Barrios y otro grupo que en realidad fue Manuel Camacho, cuyo principal operador era el actual jefe de gobierno, Marcelo Ebrard. No hay prueba alguna contra ninguno de ellos, pero todos han sido denunciados por algún medio o personaje. Debe haber una comisión en el Congreso para investigarlos a los cuatro y a todos sus colaboradores cercanos. De paso la comisión puede ir al penal de La Palma para confirmar si Aburto es Aburto y no lo han cambiado en estos años.

No dejemos a los representantes de los otros partidos fuera. El yerno del hermano de Andrés Manuel López Obrador,  José Martín Flores Torruco, un hombre que se aseguraba controlaba el narcotráfico en el sur de Tabasco y el norte de Chiapas, encabezando el llamado cártel de Palenque, fue asesinado en octubre del 205, como parte de una trama que se alargó hasta nuestros días con sucesivos ajustes de cuentas, entre ellos los del cacique Cirilo Vázquez Lagunes. ¿No merece ese caso una comisión investigadora?. ¿Que no hay pruebas contra el ex candidato?, no importa, para eso se creará la comisión. Y podríamos seguir con gobernadores panistas, priistas, perredistas. Comisiones para investigarlos a todos. Es la política chatarra, tan desechable como sus impulsores.

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