La prosperidad es de quien la trabaja
Columna JFM

La prosperidad es de quien la trabaja

La visita de Estado del presidente Calderón a Washington terminó con la misma agenda, los mismos puntos sobre la mesa con que comenzó: seguridad, migración, integración económica y se desarrolló con la misma calidez a los largo de los dos días de trabajo.

Washington DC.- La visita de Estado del presidente Calderón a Washington terminó con la misma agenda, los mismos puntos sobre la mesa con que comenzó: seguridad, migración, integración económica y se desarrolló con la misma calidez a los largo de los dos días de trabajo.

El balance de esta visita es, sin duda, positivo. La declaración conjunta identifica puntos muy concretos de colaboración en muchos ámbitos; el discurso en el congreso fue muy bien recibido y logró, sobre todo en el tema de las armas y algunos aspectos de la migración, sentar bases para un trabajo futuro. Lo importante en todo esto es qué esquema de colaboración se desarrollará y la mira que se tendrá para trabajar con esos objetivos. Quedó claro para quienes estuvimos en esta visita de trabajo que no se trata de voluntad y de puntos de contacto entre ambos gobiernos. En ese ámbito se está en uno de los niveles más altos de comunicación en mucho tiempo, personal e institucional. Lo que se requiere es establecer objetivos que vayan más allá de esa calidez y comunicación. Y queda la impresión de que el mismo está a la vuelta de la esquina si se quiere y puede trabajar para ello.

Funcionarios de muy alto nivel del gobierno estadounidense lo explicaban con bastante precisión: mucho más allá de la Iniciativa Mérida, la cooperación en el tema de narcotráfico es muy alta, en inteligencia y operación. Por primera vez se está buscando operar en forma simultánea y coordinada a ambos lados de la frontera. El tema de las armas, que el presidente Calderón explicó con mucho acierto en el Congreso, tendrá que tener una salida que vaya más allá de las declaraciones. Un ejemplo es evidente en ese sentido: hay estados como Virginia en donde es legal la venta de hasta 16 armas por persona. Evidentemente muchas de esas armas terminan en manos criminales, dentro y fuera de los Estados Unidos. Y sobre esa plataforma es donde se quiere trabajar.

En el plano económico y comercial, la salida de la crisis y la propia situación que vive Europa, son un elemento objetivo para avanzar en la integración. Paradójicamente lo que falta en este ámbito es un esfuerzo mucho mayor dentro de nuestro país para realizar las reformas que están pendientes y que podrían permitir avanzar con mucha mayor certidumbre. El presidente Calderón en su discurso en el Capitolio enumeró las reformas que se habían realizado, pero muchas de ellas son reformas incompletas. Pero no quedan dudas de que allí se puede avanzar, con Estados Unidos y dentro de nuestro país, mucho más.

Probablemente el tema migratorio adquiere en todo esto, otra dimensión. Por supuesto que se deben defender los derechos de nuestros paisanos en la Unión Americana y rechazar leyes evidentemente discriminatorias como la de Arizona. Pero lo que pide en ese sentido la Casa Blanca es que exista en el ámbito migratorio la misma correponsabilidad que se da en el tema del crimen organizado o la economía, incluso en el del medio ambiente. Y eso pasa por un control mayor de México sobre sus propias fronteras y un combate real al tráfico de gente. Ejemplos hay muchos de cómo se puede operar: en la frontera entre Sonora y Arizona, por ofrecer un dato, es realmente difícil encontrar fuerzas de seguridad mexicanas dispuestas a cortar el flujo de migrantes hacia la frontera. Se argumentará que nadie puede prohibir el libre tránsito de nuestros connacionales. Es verdad, pero ¿no cambian las cosas cuando son llevados por coyotes para cruzar la frontera ilegalmente?. Dicen en Washington y en eso tienen una buena parte de razón, que si México asumiera más ampliamente su corresponsabilidad fronteriza, y aseguran que en el gobierno federal hay voluntad para hacerlo, se allanaría el camino para la implementación de una reforma migratoria de mucha mayor escala de parte de la administración Obama. Y si se pudiera cerrar ese círculo en la migración, se fortalecería el de la seguridad, el comercio y el medio ambiente.

Todo eso es lo que estuvo en el aire en esta muy productiva, e insistimos, muy cálida, visita de Estado. El presidente Calderón dijo en varias ocasiones que se debía tratar de convertir a América del Norte en la zona más competitiva y próspera del mundo. No es una idea descabellada, pero hay que recordar que la prosperidad es de quien la trabaja.

Casualidades

¿De verdad no hay ninguna relación entre el secuestro de Diego Fernández de Cevallos y el “asalto” que sufrió el general retirado Acosta Chaparro?

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Salir de la versión móvil