Dos cartas comienzan a quedar claras para el 2012, independientemente de que habrá varias más, incluso en sus propios partidos. Por una parte Enrique Peña Nieto, quien aseguró este domingo que se opondrá a la reelección de legisladores y presidentes municipales, al refrendo del gabinete por el senado y a la segunda vuelta electoral. Por la otra, Josefina Vázquez Mota que abandonó los eufemismos y aceptó algo que resulta evidente: que está interesada en ser candidata panista para el 2012. También este fin de semana se volvió a autodestapar Andrés Manuel López Obrador, pero eso ya no parece ser noticia.
Dos cartas comienzan a quedar claras para el 2012, independientemente de que habrá varias más, incluso en sus propios partidos. Por una parte Enrique Peña Nieto, quien aseguró este domingo que se opondrá a la reelección de legisladores y presidentes municipales, al refrendo del gabinete por el senado y a la segunda vuelta electoral. Por la otra, Josefina Vázquez Mota que abandonó los eufemismos y aceptó algo que resulta evidente: que está interesada en ser candidata panista para el 2012. También este fin de semana se volvió a autodestapar Andrés Manuel López Obrador, pero eso ya no parece ser noticia.
En el caso de Peña Nieto, se trata no sólo de la confirmación de sus aspiraciones (ello por si alguien requiriera de esa ratificación) sino incluso de una opinión que va más allá: las tres medidas a las que dice Peña que se opondrá en la reforma política, positivas o no, lo cierto es que debilitan de alguna manera el poder presidencial: la reelección fortalece el vínculo directo con los electores en lugar que con los partidos y sobre todo con un presidente que aspira no sólo a ganar sino a tener mayoría propia en el congreso; el refrendo del gabinete por el senado obviamente debilita y disminuye las atribuciones presidenciales y la segunda vuelta puede permitir alianzas de contrarios para derrotar al favorito, léase en este caso el propio Peña Nieto. El gobernador mexiquense está opinando y trabajando ya no para las elecciones, sino para la situación que tendrá que sobrellevar cuando gane. Podrá gustar o no esa decisión, pero es evidente que es así. Y si alguno tiene dudas al respecto habrá que esperar que se designe al nuevo procurador mexiquense: será, aseguran, el ex gobernador César Camacho, uno de los mejores políticos del entorno de Peña, y casi la única salida para restaurar el desastre que dejó en ese despacho el caso Paulette.
En el lado del panismo decíamos que cuando se tienen tantos precandidatos no se tiene a ninguno. En el círculo más cercano al presidente Calderón hay varios: Ernesto Cordero, Javier Lozano, Alonso Lujambio (aunque algunos futureen no hay más nombres en el gabinete para ese año) son los tres más nombrados, aunque los tres están esperando la señal de su jefe. Fuera del gabinete, Santiago Creel hace tiempo que está en busca de la revancha interna del 2005 y quiere la candidatura presidencial. Y mucho más cerca de Calderón pero sin ser parte ya del círculo más cercano, aparece con fuerza Josefina Vázquez Mota, que no sólo está recorriendo los estados y pudo colocar a buena parte de sus seguidores en el Consejo Nacional sino que por primera vez reconoció que sí está contemplando la posibilidad de lanzarse al ruedo presidencial. Y Josefina puede tener un perfil interesante para el próximo proceso electoral, dando por sentado que no tiene interés alguno en buscar en el 2011 la candidatura del estado de México.
Decíamos que en el PRD no es sorpresa que López Obrador se autodestape como candidato para el 2012. Lo que hay que ver es qué harán los otros: Marcelo Ebrard está superando a López Obrador en la percepción del voto general pero entre los perredistas el peso del tabasqueño es grande. Pero si quiere tener opciones para ganar, el PRD sólo puede apostar por su jefe de gobierno. Esa parecía ser la base de la alianza con los Chuchos en la dirigencia nacional, pero el caso de Greg Sánchez puede hacer titubear a muchos por la defensa a ultranza que ha hecho Jesús Ortega de su amigo y candidato. Una defensa que parece debilitar más que fortalecer a su corriente: el caso de Greg parece contar con elementos muy sólidos que difícilmente podrán echarse para atrás. Y la decisión de ir a la elección con un candidato que está en la cárcel no paree ser, tampoco, lo más aconsejable, aunque la esposa de Greg, Niurka Sávila esté jugando, como dice Yuriria Sierra, a ser la Eva Perón que en 1943 libró con su activismo de la cárcel a su esposo, Juan Domingo Perón, iniciando una era de un activísimo populismo autoritario en Argentina. Pero esta historia puede ser el Watergate de los Chuchos, sobre todo si fracasan las alianzas con el PAN.
Encuestas y redes sociales
Antanas Mockus, el candidato verde para la presidencia de Colombia decía estar empatado con su contrincante, el ex secretario de la Defensa, Juan Manuel Santos, y se había convertido en un fenómeno de las redes sociales, donde muchos apostaron (y aseguraron) que ganaría la elección del domingo pasado. Las encuestas menos serias hablaron de un empate en los comicios. Lo cierto es que Santos ganó dos a uno a Mockus. Y si bien tendrá que ir a segunda vuelta, apenas le faltaron tres puntos para la mayoría absoluta. Fallaron, una vez más, las encuestas y las redes sociales. Son muy útiles, pero no deben ser sobrevaloradas.